ORACION

ORACION.- Nuestro agradecimiento al D.P. Julio Cirigliano
Que nos enviò esta tan linda oración.


Dios, Padre Bueno, llego a Ti cargado de ruegos y súplicas.
Son las que hombres y mujeres vuelcan en este servidor y ... las mías propias.
Nos impacientamos, nos rebelamos, desconfiamos y nos negamos a cargar con la propia cruz...
Asustados y debilitados, agotados física y mentalmente caemos en la tentación de la duda y el temor nos domina. Nos reconocemos pecadores.
Son las palabras de tu Hijo Unigénito las que nos inyectan nuevas esperanzas, nuevos bríos para trabajar por el reino: “Hombres de poca fe. ¡Ánimo! ... No tengan miedo ...” Son ellas las que nos invitan a dirigirnos a Ti en su Nombre, porque “es el Camino, la Verdad y la Vida” que a Ti nos conduce.
“¿A quién podemos ir Señor si sólo Tú tienes palabras de vida eterna”?
Es a Ti, a quién recurrimos buscando ayuda y orientación ante estas necesidades y urgencias humanas. Tú nos brindas consuelo en tu infinita misericordia. Tú nos enseñas a ser mansos y humildes como Tú, porque “tu carga es ligera, tu yugo es liviano” y nos abres tu Sagrado Corazón para brindarnos refugio y consuelo.
Permítenos reconocerte a nuestro lado... como lo experimentaron los discípulos de Emaús, aquella tarde en que te pidieron: “¡Quédate con nosotros, Señor, que ya se hace noche?” y con ellos pasaste a compartir la cena.
¡Ábrenos los ojos, Señor!
Creemos en Ti, Señor ... pero “aumenta nuestra la Fe”. Muéstranos Señor tu rostro y danos tu bendición. Amén.